Mensaje de Navidad y fin de año
Publicado: 2020-12-09
Como Rector de la Universidad de Costa Rica quiero enviar un efusivo saludo navideño para toda la comunidad universitaria, no solo por ser esta una época culturalmente significativa, sino, adicionalmente, como muestra de agradecimiento por el compromiso mostrado durante el año 2020, tan particular y especial como ningún otro que hubiera enfrentado nuestra Institución desde su creación, ni la humanidad en su historia reciente.
Nuestra Universidad, además de salir avante en un año colmado de situaciones inciertas, complejas e inéditas, se ha mostrado fortalecida, con una gran capacidad creativa y adaptativa, ejercitando en su máximo esplendor y potencialidad, los principios, fines y propósitos que le instituyen como una casa de educación superior, tan humanística como científica y de alta excelencia.
La solidaridad institucional ha cubierto a las personas funcionarias y al estudiantado, garantizándoles el derecho al estudio y al trabajo en condiciones dignas y, por medio de ellos, prolonga indirectamente tal solidaridad con sus parientes y familiares; así como con la comunidad nacional en general, a la que nos debemos sin ningún miramiento, pues constituye el sentido máximo de nuestra razón de ser.
No caben más que palabras de agradecimiento, al concluir este año en las condiciones que lo hacemos, habiendo fortalecido nuestro quehacer sustantivo integralmente y nuestros proyectos de servicio para con la sociedad; así como garantizado las condiciones materiales necesarias para el trabajo del año entrante. Esto evidencia reconocimiento, confianza y gratitud de nuestra población y de los principales actores políticos nacionales, es decir, se muestra una voluntaria y honorable complicidad para con la Universidad de Costa Rica, merced a la cual debemos responder con reciprocidad proporcional, como ha caracterizado a nuestra institución históricamente.
El momento también es propicio para manifestar que lamento profundamente, con lo que estoy seguro que hago eco del sentir institucional, las dificultades y los dolores que la pandemia hubiera generado para las familias costarricenses; pero también subrayo con certeza que nuestra Institución continuará apoyando, en todo lo posible y necesario, para generar condiciones que hagan más llevadera y humana esta coyuntura.
Fieles al significado etimológico de la palabra “Navidad”, debemos cifrar nuestra esperanza y dirigir nuestras acciones, para trasmutar la amenaza por el COVID-19 en reto pedagógico y posibilidad de desarrollo y crecimiento; comprendiendo que toda crisis debe constituirse en necesidad de mejora y superación; figurativamente: nacimiento creativo y moral de potencialidades, oportunidades y certezas. La templanza, la fortaleza, y la sabiduría, entre otras virtudes, deberán ser los distintivos que caractericen a esta generación que ha sobrellevado este contexto pandémico, mostrando un producto muy superior al pensando nunca antes.
A pesar de la situación que afrontamos, aprovechemos este aire de diciembre para llenarnos de esperanza. Disfrutemos de estas fiestas, siempre respetando los protocolos de higiene y las medidas de sanitarias que ya conocemos.
Un abrazo profundo, deseándoles la mejor navidad posible y un nuevo año 2021 que, en unidad, sea escenario de certidumbre, desarrollo pleno y superación.
Dr. Carlos Araya Leandro
Rector
recepcion.rectoria@ucr.ac.cr