Publicado: 2020-05-26

Hoy Costa Rica cumple con una deuda histórica hacia toda la población pues, al adoptar el matrimonio igualitario, reconoce la obligación del Estado de garantizar los derechos familiares a las parejas del mismo sexo.

En su trascendental Opinión Consultiva, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) estimó necesario reconocer la importancia neurálgica de la ‘familia’ como institución social, “la cual surge de las necesidades y aspiraciones más básicas del ser humano. Busca realizar anhelos de seguridad, conexión y refugio que expresan la mejor naturaleza del género humano”.

Desde la Universidad de Costa Rica, institución humanística, en este día celebramos que el país da un paso más hacia el respeto de la dignidad humana, hacia la posibilidad de ser, sentir y amar sin ataduras, y la posibilidad de hacer valer todos los derechos que se deriven de un vínculo familiar entre personas del mismo sexo, como han afirmado la Corte IDH y la Sala Constitucional.

Este día honramos también la vida y las luchas de quienes esperaron durante años este momento. Nos alejamos cada vez más de la exclusión y la discriminación, para acercarnos a una sociedad justa y respetuosa, en donde cada persona pueda elegir su futuro sin que se le juzgue por ello.

Desde nuestra institución seguiremos apoyando los pasos que permitan reconocer la identidad de cada persona miembro de nuestra comunidad universitaria, respetar sus decisiones y convivir en armonía, pues sabemos que los cambios empiezan en casa. Apelamos al diálogo en la sociedad, a ser un país más inclusivo, y a que toda persona se sienta segura y confiada de vivir en una nación realmente libre, que defiende los derechos de todas y todos por igual. Todo avance de los derechos humanos debe ser respetado, celebrado y alentado.

Dr. Carlos Araya Leandro
Rector, Universidad de Costa Rica
prensa.rectoria@ucr.ac.cr