Publicado: 2019-03-06

Juan Josué Quesada, quien vive en Los Chiles de Aguas Zarcas, es el mayor de tres hermanos, y el primero que ingresa a la universidad. En pocos días iniciará sus estudios en la Sede de Occidente, y para ello se mudará a las residencias estudiantiles ubicadas en San Ramón, donde por primera vez vivirá de forma independiente a su familia.

Él es uno de los 294 estudiantes de primer ingreso que esta semana recibirán una inducción a su nueva vida universitaria, mediante los talleres de ambientación que el Programa de Residencias Estudiantiles de la Universidad de Costa Rica (UCR) promueve en nueve recintos distribuidos por todo el país.

En este ciclo lectivo, un total de 822 estudiantes se integrarán a este programa, uno de los beneficios complementarios de las categorías de beca socioeconómica 4 y 5. El beneficio se otorga al estudiantado en virtud de la lejanía de su vivienda y la complejidad de trasladarse diariamente hacia su lugar de estudios.

“Las residencias son una de las estrategias de acompañamiento a la permanencia más destacadas y exitosas de la UCR, determinantes para la población que proviene de núcleos familiares de escasos recursos y que ha sido admitida en carreras en sedes alejadas de su vivienda”, explicó Ruth De la Asunción, vicerrectora de Vida Estudiantil.

Actualmente la UCR cuenta con residencias estudiantiles en la Sede Rodrigo Facio; en la Sede de Occidente (tanto en sus recintos de San Ramón como de Grecia); en la Sede del Atlántico (en sus recintos en Turrialba y Guápiles); en las sedes de Guanacaste, Pacífico y Caribe, y en el Recinto de Golfito.

En los últimos años, la UCR ha hecho considerables intervenciones en la infraestructura de las residencias, para garantizar su aprovechamiento según las necesidades de los estudiantes. Entre las más recientes destacan la reconstrucción de las residencias en Guápiles; el cambio de la planta eléctrica en las residencias de San Ramón; la remodelación de varios edificios de residencias en el Recinto de Golfito, y la construcción de un edificio nuevo en la Sede Rodrigo Facio. Asimismo, este año se hará el diseño de planos para dos nuevos pabellones de residencias en la Sede de Guanacaste.

Sin embargo, las residencias son mucho más que una habitación o un edificio compartido: este programa conlleva un acompañamiento cercano de profesionales en orientación, psicología, trabajo social y otras disciplinas, para garantizar que la adaptación de los estudiantes a este nuevo estilo de vida no sea un obstáculo en su proyecto de estudios.

“Además de contar con infraestructura en condiciones óptimas, este programa proporciona una atención integral a la población estudiantil residente que le permita desarrollar habilidades para la vida y le favorezca en su estabilidad emocional, social y académica, en un entorno saludable”, agregó Anabelle León, jefa de la Oficina de Becas y Atención Socioeconómica (OBAS), que administra este programa.

“La convivencia en la residencia es muy grata, y se desarrolla un gran compañerismo”, comentó Brandon Maroto, estudiante de Contaduría Pública y residente en el Recinto de Guápiles, quien iniciará su cuarto año de carrera. Proveniente de la reserva indígena de Boruca, en Buenos Aires de Puntarenas, explica que dado que todos sus compañeros provienen de zonas alejadas, se dan apoyo entre sí para conocer su nueva ciudad y sus servicios. “Me siento muy agradecido, pues con este programa sé que puedo centrarme en mis estudios”, agregó.

Según detalló León, la otra modalidad de beneficio complementario para estudiantes que residen en una zona lejana a su centro de estudios es la reubicación geográfica. Para este ciclo lectivo, un total de 7940 estudiantes recibieron este beneficio. De los más de 28 000 millones de colones del presupuesto del sistema de becas para este año, 6438 millones de colones se destinarán a la reubicación geográfica.

“Construimos para nuestro estudiantes espacios más humanos y de calidad, impulsando la igualdad de oportunidades, que potencien su adecuado rendimiento académico y una óptima adaptación a la vida universitaria” indicó Henning Jensen Pennington, rector de la UCR.

Caterina Elizondo Lucci
Periodista, Rectoría
caterina.elizondo@ucr.ac.cr