Publicado: 2019-06-12

“La concertación política contra la universidad pública es una expresión contra el conocimiento, los derechos ciudadanos, las políticas públicas y el desarrollo. Pero justo en la universidad pública se ha conquistado la libertad de pensamiento, y con la independencia de gestión se da garantía de calidad y pertinencia académica y social para la educación superior y el desarrollo nacional”.

Así lo indicó el rector de la Universidad de Costa Rica (UCR), Henning Jensen Pennington, en su discurso de presentación del informe anual de labores, correspondiente al periodo 2018-2019.

En el marco de una sesión solemne del Consejo Universitario, celebrada este martes 11 de junio en el Aula Magna, el rector inició su presentación haciendo mención del contexto político actual y de las adversidades que enfrentan las universidades públicas, especialmente la UCR, “señaladas como responsables del descalabro financiero estatal de las administraciones gubernamentales”.

“Se han reducido los recursos institucionales de la política pública, afectando los derechos de las poblaciones beneficiadas. La regresividad agrede la autonomía universitaria, como un modo de atacar lo público, la institucionalidad y el Estado de Derecho”, afirmó el rector.

A lo largo de su discurso, Jensen recalcó que tales adversidades no han impedido a la UCR alcanzar sus 79 años con una cotidiana y permanente labor en la difusión y creación de conocimiento, en un ambiente que procura ser cada vez más inclusivo y promotor de la equidad. El rector rescató los programas de empleabilidad para personas con discapacidad en el sector docente y administrativo como un ejemplo de la necesidad de ampliar las oportunidades para quienes tengan estas condiciones.

Desde el aspecto docente señaló que, a lo largo del 2018, 46 planes de estudio formalizaron su oferta, garantizando que los estudiantes pudieran acceder a planes de estudio en condiciones académicas, administrativas y presupuestarias de calidad. Asimismo, mencionó que se acreditaron dos carreras y dos más se reacreditaron con el Sistema Nacional de Acreditación de la Educación Superior (SINAES); cinco fueron reconocidas como carreras acreditadas (a partir de la equivalencia sustancial emitida por la Canadian Engineering Accreditation Board, CEAB), y un laboratorio fue acreditado por una agencia internacional, al tiempo que se abrieron 20 procesos de autoevaluación; 12 más que en el 2017.

En relación con la acción social, Jensen recalcó la labor del Foro de Acción Social bajo el lema Hacia la universidad de los saberes por el bien común, que culminó en abril del 2018. Al respecto, destacó que ese año se llevaron a cabo 184 proyectos de trabajo comunal universitario (en donde cientos de estudiantes aportaron más de un millón de horas a la sociedad); 317 de educación permanente; 106 de trabajo en comunidad, y más de 160 de servicios especiales y culturales en comunidad, para un total de casi 770 proyectos que vinculan a nuestra universidad con la sociedad.

Con respecto al área de investigación, el rector destacó el programa de posdoctorado y el Espacio Universitario de Estudios Avanzados (UCREA), como acciones estratégicas para apuntar a una investigación de alto nivel, multi y transdisciplinaria, innovadora e internacional. Además, destacó que para el 2018 se registraron 1 385 proyectos, 306 actividades, 128 prestaciones de servicios y 48 programas de investigación, en todas las áreas del conocimiento, tanto para el área de investigación básica, aplicada y tecnológica.

En sus palabras, el quehacer institucional no puede desligarse del nacional ni del internacional, en momentos en que la globalización académica debería ser empleada para acercarse y poner recursos y conocimientos en común. Por ello, Jensen celebró la participación de más de 1370 universitarios en actividades en el exterior, para adquirir experiencia y dar a conocer su trabajo; la permanencia de 260 personas becarias en el exterior realizando estudios de postgrado –la mayoría doctorados–, y la movilidad de 113 estudiantes a intercambios académicos en el exterior, en el marco de acuerdos específicos de movilidad, y mediante el Programa de Movilidad Estudiantil Internacional de CONARE, de los cuales 71 fueron estudiantes de sedes.

En esa misma línea, Jensen señaló el creciente aporte al Programa de Desarrollo Regional, con un incremento de casi veinte mil millones de colones en cuatro años. “Estos aumentos han permitido crecer en infraestructura, ampliar los programas de becas y fomentar el vínculo con las comunidades en prácticamente todo el país”, concluyó el rector, al tiempo que mencionó que este año se entregaron 3025 m² de área construida en sedes y recintos, y que todas las sedes tuvieron más del 77 % de sus estudiantes con beca socioeconómica vigente en ambos semestres.

El informe completo estará disponible en www.rectoria.ucr.ac.cr

Caterina Elizondo Lucci
Periodista, Rectoría
caterina.elizondo@ucr.ac.cr