Violencia en Centroamérica será analizada por destacadas activistas sociales de la región
Publicado: 2017-09-18
Las tres expertas que estarán presentes en el foro provienen de Guatemala, Honduras y El Salvador, países donde libran sendas luchas en contra de la violencia y por la protección de los derechos humanos. Ilustración: ODI.
Tres sobresalientes activistas de América Central se darán cita en el Foro de Reflexión sobre los Hechos de Violencia en Centroamérica para comentar los diferentes factores que hacen al istmo la región más violenta del mundo fuera de una zona de guerra abierta. La actividad se realizará el martes 19 de setiembre, a las 3 de la tarde, en el Auditorio de la Ciudad de la Investigación, en Sabanilla de Montes de Oca.
El objetivo del foro será analizar los entornos violentos en los que vive la población centroamericana con el fin de crear políticas para alcanzar mayores niveles de paz social, justicia y equidad, a través de los testimonios de una guatemalteca, una hondureña y una salvadoreña.
Todo lo anterior se enmarca del Año de las Universidades Públicas para la Vida, el Diálogo y la Paz, que suscribieron las cinco casas de enseñanza superior estatales del país, reunidas en el Consejo Nacional de Rectores (CONARE).
Invitadas. Quizá la conferencista más conocida en nuestro medio sea Bertha Zúñiga Cáceres, de Honduras, hija de Bertha Cáceres, quien fuera asesinada el 3 de marzo del año pasado, tras librar una lucha contra una gigante hidroeléctrica china para evitar la usurpación de territorios indígenas.
Bertha Zúñiga trabaja a tiempo completo con el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras, motivo por el cual debió dejar la maestría en Estudios Latinoamericanos, que cursaba en Ciudad de México. Además supervisa las investigaciones por el feminicidio de su madre.
La segunda invitada es la periodista guatemalteca, Alejandra Gutiérrez, directora editorial de un sitio web informativo llamado Plaza Pública, que combina investigación y debates principalmente sobre democracia, derechos humanos y desarrollo integral sostenible.
La otra comunicadora que estará en el panel es la productora salvadoreña Marcela Zamora, quien posee su propia empresa de producción audiovisual Kino Glaz, donde realiza documentales, campañas y proyectos de sensibilización social para impulsar a las mujeres en su país. Además trabaja como directora para El Salvador de la Alianza Latinoamericana para la Reducción de los Homicidios y la Violencia.
Todas ellas han jugado un papel protagónico de denuncia y lucha por la justicia social y el desarrollo sostenible en medio de países con las tasas más altas de asesinatos per cápita, como Honduras, El Salvador y Guatemala, lo cual incluye también un elevado número de feminicidios.
La peligrosidad de la región para activistas sociales de cualquier naturaleza es un aspecto que destaca la Dra. Monserrat Sagot, socióloga y moderadora del foro. La experta asegura que el tejido social en América Central se encuentra prácticamente desgarrado por la violencia cotidiana y por la opresión ejercida por el poder en estos países.
“Hemos comprobado que las políticas de cero tolerancia, mano dura y guerra contra las drogas más bien incrementaron la violencia y crearon estados de guerra abierta. Hay presión para que los Estados ofrecezcan a ciertos sectores de ciudadanía más presencia policial o del ejército, para hacer pensar que son soluciones, pero estas solo incrementan la violencia y la desigualdad. Afectan principalmente a jóvenes, mujeres y activistas sociales”, explicó la Dra. Sagot.
Según la socióloga, no hay política que pueda ser efectiva contra la violencia si las sociedades centroamericanas siguen siendo desiguales y poco democráticas. Para lograr un cambio sustancial se requieren políticas redistributivas que generen un cambio radical en el sistema, aunque este proceso es complejo.
“En Centroamérica hay una larguísima historia de violencia, exclusión social, racismo, intervención colonialista… En la región quedaron muchísimas armas de la época de la Guerra Fría y este ambiente violento se incrementó con el narcotráfico y los negocios ilícitos que los gobiernos dicen combatir pero que realmente no lo hacen”, criticó la Dra. Sagot.
Los fracasos en el combate a la violencia han golpeado principalmente a las mujeres. Las agresiones contra el género femenino se ha incrementado debido a la falta de políticas efectivas que no han pasado de ser mera institucionalidad, pues al igual que los otros tipos de violencia, esta también está asociada con la desigualdad y la exclusión, afirma la experta.
Pablo Mora Vargas
Periodista, Rectoría
pablo.moravargas@ucr.ac.cr