Publicado: 2013-09-06

 

«Respetando la diversidad de saberes, la Universidad está llamada a promover la unidad y el diálogo entre disciplinas por ser la Institución que en su mismo nombre lleva presente la unidad del conocimiento». Así lo concluyó el Dr. Henning Jensen Pennington, rector de la Universidad de Costa Rica (UCR), durante una de las jornadas del Seminario Hacia una Investigación Interdisciplinaria Avanzada.

Con la participación de académicos y académicas de diversas disciplinas, en la actividad organizada por la Rectoría, las vicerrectorías de Investigación y Docencia, la Cátedra Guillermo y Alejandro de Humboldt y el Servicio Alemán de Intercambio Académico (DAAD), se sentaron las bases de lo que será el Programa de Estudios Interdisciplinarios Avanzados.

El objetivo principal de este programa es crear un espacio-marco innovador e internacional de investigación y de estudios de alto nivel, que fomente la interdisciplinariedad al interior de la organización y de las actividades que desarrolla la Institución.

Según lo explicó el Rector, la idea es ir abriendo puertas para que, con el concurso de muy diferentes perspectivas, abordar diferentes problemas, tanto estrictamente científicos como prácticos, que requieran de una solución para la cual sea necesaria la participación de varias disciplinas.

Como requisito fundamental, dijo Jensen, es necesario retomar la comunicación entre saberes, que en los últimos 150 años se ha perdido gracias al proceso paulatino de especialización.

Aunque a su juicio, este proceso llevó a un grande e intenso desarrollo científico y a la solución de problemas teóricos y prácticos, uno de los costos fue la interrupción de ese diálogo, que hoy se hace fundamental para hacer frente a grandes retos de nuestro tiempo como son el cambio climático, la seguridad alimentaria y la búsqueda de energías alternativas, que requieren respuestas complejas, que no pueden darse a partir de una sola disciplina.

«Pero para asumir este reto –apuntó el Rector- la Universidad como institución debe ser mucho más flexible de lo que es ahora y facilitar la formación de grupos de trabajo dedicados a la investigación y docencia interdisciplinarias».

Además, se tiene que tomar en consideración que el diálogo interdisciplinario es trabajoso, extraordinariamente arduo y debe ir mucho más allá del simple hecho de compartir información. «No es una sumatoria de perspectivas, es mucho más que una mera agregación de conocimientos. Se trata de lograr una visión simultánea, desde diferentes ángulos, del objeto de estudio».

Apuntó que el gran reto del enfoque interdisciplinario es entonces tratar de ver con simultaneidad, logrando a la vez una mirada oblicua de lo que se estudia, tomando siempre en cuenta el lenguaje de la otra disciplina, sus conceptos, su lógica, el movimiento de sus palabras y la cadencia de las neuronas.

«Esto no quiere decir que todo sea accidental o sea absolutamente contingente, sino que cualquier cosa, objeto, proceso social o cultural, es la manifestación compleja de una historia de ese objeto, historia que también es historia en la naturaleza».

Y a pesar de que el Dr. Jensen es consciente que desarrollar esa mirada oblicua no es fácil y puede provocar ansiedad e incertidumbre entre disciplinas, la clave es que estas disciplinas que son entidades históricas, con dominios igualmente históricos, persistan en ese diálogo.

Actualmente la UCR cuenta con ejemplos exitosos al respecto, como lo es el Doctorado en Estudios de la Sociedad y la Cultura, en donde se reúnen estudiantes que provienen de muy diferentes disciplinas en la búsqueda de un lenguaje compartido, donde el intento, a la larga, resulta una experiencia muy enriquecedora.

Asimismo, varias iniciativas interdisciplinarias que existen simultáneamente, en torno a temas como fuentes alternativas de energía, desarrollo de la ciencia y la tecnología, problemas ambientales, ciencia de materiales, nanotecnología, biotecnología, neurociencias y muchos otros más.

En los últimos años también han surgido novedosos laboratorios interdisciplinarios que buscan innovaciones científicas y tecnológicas en el campo de las ciencias biomédicas y en las ingenierías.

Frente a esos nuevos desarrollos académicos, enfatizó el rector, seguramente serán necesario cambios estructurales y funcionales en nuestra universidad. «Queremos ofrecer una instancia de colaboración e integración dentro de un marco que sea innovador, con una mayor estructura y financiamiento, que tenga impacto nacional y transcendencia internacional».

Para la Dra. Alice Pérez Sánchez, vicerrectora de Investigación, pensar en el establecimiento de un programa de estudios avanzados intenta dejar colocados aquellos puntos de conexión que permitan un pensamiento sin restricciones en todos los ámbitos de la investigación.

Asimismo, dotar a la Institución de espacios de libre investigación, para la actividad intelectual disciplinaria, crítica y constructiva, donde se respete y nutra la libertad ilimitada de la mente y donde la excelencia en todos los aspectos sea la guía.

Gustavo Fernández Q.
Periodista, Rectoría
gustavo.fernandez_q@ucr.ac.cr